• Down to Agony - El sueño de vernos caer
  • Down to Agony - Split Fall of Efrafa
  • Down to Agony - Requiem por un mundo enfermo
  • Down to Agony - No Vida

Harto

Harto de la lucidez del fracaso. Harto de recrearme en él
Harto de crearme infiernos entrando por un pozo en el desierto
Harto de calar mis huesos. Harto de que abrase una lluvia infame
Harto de reflejos siniestros a media noche; y al amanecer
Harto de escribir únicamente bajo el cobijo de la incertidumbre
Harto

Vámonos de aquí

Vámonos de aquí

Los trenes salen puntuales
Y encumbran su ruta
en la misma estación
donde lo hicieran ayer y anteayer

Es demasiada carga para mi
El sol sólo cae cuando los cuerpos
Ya están exhaustos de clamar auxilio
Por la eternidad y el tiempo perdido
Y nadie les escucha, nadie les entiende
Nadie pone nunca nada en duda

Aplasté mi alma sobre el cemento
Y así pude ver gigantes alzarse
Para encauzar toda la vida
Y proteger todos los sueños

¿No son suficientes motivos
para huir y dejar atrás todo esto?

Monumento a los relojes rotos

Necesito tiempo para aprender y comprender
Un poco más acerca de todas esas canciones
Que gritan recuerdos en el instante imposible; y arder

Necesito tiempo para pasear por intrincadas callejuelas
En busca de la avenida No porvenir; y Bourbon street

Necesito tiempo para devorar viejas historias de dramas y anhelos,
Atmósfera secreta, creada por su infinito afán de destruir; y de vivir

Necesito tiempo para atravesar fronteras
Comprobar como todas las ruinas centellan, deslumbran y no convencen,
Y suspirar aliviado porque algunas hogueras todavía dan calor; y brillan

Necesito tiempo para así mirar desafiante al vacío; y no preguntar
Necesito tiempo para no mirar atrás ni adelante; y construir nuestra historia
Necesito tiempo para despreciarlo; y devorarlo

El sueño de vernos caer

Cómo podremos hablar
De la sutileza del abismo
Que nos distancia sin fin
Que nos obliga a correr
En pos de los límites
De la indiferencia
La carrera de fondo
La colisión venidera

Nosotros somos lobos que aúllan
Sobre los principios de lo presumible
Aullamos silencio y aullamos palabras
Hipérboles mudas que retumban
En sordos precipicios de lo previsible

De negro riguroso os saludamos
Y os brindamos el sueño de vernos caer
Adiós, os decimos; es el tiempo
De ver la noche erguirse
De volver a creer
En todo lo que negamos
En todo lo que erramos
En todo lo que afirmamos
En todo lo que ansiamos

Dibujando imposibles

Sumergido en la vorágine de una victoria ficticia y un atardecer
Siento un mundo que encoge, siento un mundo que es hiel
Siento que ardo y perezco y siento que sólo es el principio

Una obsesión que perpetua el giro incesante de la aguja
Tragado por la gran espiral que es uno mismo

[Donde] El devenir de la vida son puertas cerradas
Que se cierran ante ti. Donde sombras
Habitan malformadas y son concebidas en luz
Demasiado tenue y demasiado áspera

Donde los gritos son susurro en el silencio
Donde cristales opacos dibujan una catarsis imposible
Y su reflejo lo pone en entredicho

Pero seremos invisibles, acecho de sombras,
que arden y son humo
En cada rincón gritarán tambores de guerra
que son sordos

Mientras su eco susurra hasta el estruendo
Transformando la tristeza en pasión
La desesperación en aliento
Los grilletes de lo fútil en afilada venganza

La aridez del camino

Cómo podré aguantar
Inmerso en este laberinto
De angustiosa espera
Y fuerzas desmedidas

Cómo afrontaré tantas batallas
Si hace tiempo que me abandoné
Al pretexto cotidiano de evadir la derrota
Y reafirmar la aridez del camino

No me permitiré fallar jamás
En tantos y tantos momentos invisibles
Donde pasaré de puntillas sobre el infierno
Estrechando vendavales y fatigas

Cien mil caballos desbocados sumaré
Como ejercito que nunca descansa
Para alejar todos mis demonios
Y brindar una vez más y otra vez más

Abrazar el desorden de la duda
Y tratar de equilibrar la cadencia
De la euforia y el desaliento
para encumbrar el infinito

Nos pertenecen

Descansan aquí las horas

Alentadas por

Retazos de impaciencia
Miedos y obsesiones
Piezas frágiles tal vez

Pero siempre olvidan
Que saltar al vacío con red
Resulta mucho más fácil
Que conquistar el reflejo del mundo

El recuerdo perpetúa un camino común
Donde nunca estuve solo
Desafiamos la lógica
No perdimos un instante
Tampoco en las noches donde
El frío entumecía y dolió

Cuando un enjambre de dudas
Lo amenace todo
Nos perderemos en la música de fondo
Hasta los confines del mundo nos pertenecen

No será la última tormenta

Aún recuerdo el día en el que reí
Al ver el cielo hundirse e intimidar
Aún, confieso, cierto temor al saber
Que no sería la última tormenta

Porque sólo podía alentar
La caída de todas las alturas
Apostar la vida a un golpe de suerte,
En la eterna espera por la inspiración

Miedo y Recuerdo presiden
La mesa donde se erigen
Esclavos y hambrientos
Los temores y las esperanzas

Lo que sin duda no es tan trágico

Ya caí una vez y otras tantas le siguieron
Y saldé mi deuda con el colosal desprecio
De saberme perdido, de conocer el norte
De saber de antemano que nada está aún escrito

Down to Agony

El sueño de vernos caer

Arrastrados

En la nada nacimos y en la nada morimos
Con suculentas vistas al vacío opulento
donde cadáveres se arrastran,
donde cadáveres se apilan, gritando
por migajas podridas que nunca sacian el hambre
Culpando y señalando en sentido equivocado
El fuego no puede quemar las ideas ignífugas
pero ya no ardemos por dentro ni nos podrimos por fuera

Requiem por un mundo enfermo

Habéis construido sobre los vestigios
de un mundo ya enfermizo la eternidad
Levantando muros, creando aislamiento
estirándonos la cara hasta sonreír
Nos quisisteis dar un paraíso
que adorar y venerar
Nuestro tiempo ocupado
en descifrar el significado
de sueños ajenos
Tantas cosas con las que reafirmar
nuestra ya firme personalidad
Interrelacionar. Hombres-máquina
para que el mundo gire vacío y todo siga igual
Debisteis apuntar mejor.
No nos habéis enterrado, todavía no
todavía vivimos, todavía ardemos, amamos,
todavía sentimos, todavía lloramos, todavía gritamos
todavía nos arrastramos
en interminables noches sin tregua

El silencio de lo marchito

No sois dueños de vuestro tiempo, no podréis engañaros
Como viejos trapos vais vagando, miseria, teatro absurdo y devastado
Hartos de pasear por avenidas tristes
rebosantes de cuerdos huyendo de sus vidas
aisladas en lo monótono de no sentir nada más que el vacío
vacío que aplasta tu vida, ¿qué sientes?
Atrapados en su sueño reloj, maniatado el Dios
Su consciencia sumergida en el camino del martirio
Nosotros nos deslizamos sinuosos con los locos
No queremos vuestro mundo ni vuestras vidas,
no queremos vuestro tedio que sólo depara muerte sin vida
Y el silencio de lo marchito ensordece tu vida
y los años desperdiciados se clavan en tu retina mostrando tu miseria

Sin planes, sin esperanza, sin control

Ciudades anegadas de muertos
que realmente nunca nacieron
conforman el paisaje
de una realidad sin distorsionar
El sueño de la razón produce monstruos
mientras la nada se abastece de la nada
Sin planes, sin esperanza, sin control
Sólo cuatro paredes,
una botella en la mano
y desesperación

Down to Agony

Requiem por
un mundo enfermo

Donde arderemos

Cientos de miles de horas enterrando ilusiones,
disculpando el presente que padecemos
Cientos de miles de ideas evocando el delirio,
anhelando el futuro donde arderemos
Hierro fundido y mecanismos
recorren cuerpo y alma
La ilusión soterrada con nosotros
Quiero matar la lógica que mecaniza sentimientos
y desenterrar la pasión difuminada
que se perdió entre tanta niebla artificial

Giran las saetas

Giran las saetas con ritmo fúnebre
Horas plagadas de tedio y monomanía
Sentimientos programados, anquilosados
Tic tac, así suena la muerte
cuando no eres dueño de tu tiempo
Nos quieren ver aburridos, entretenidos
Inmóvil musa del poder retroalimentado
Las balas no atraviesan mierda intangible
pero materializaríamos algunos sueños

Down to Agony

Split Fall of Efrafa

Angustia

Empiezo a comprender todo aquello que obvié
vacilante al ver las sombras engendradas por el sol
Y en la oscuridad que provoca el resplandor,
me parapeto en el subterfugio que creé y aniquilé
Con ilusiones contradictorias provenientes del ayer,
trazando la disputa que aconteció en mi ser
Y me encierro en la oscuridad de la incertidumbre,
ahogado en el vacío de mis peores tormentos,
anhelando un letargo tranquilo que tiene que llegar
Pero sólo aquellas lágrimas agitadas conocían la verdad

Hasta el final

Caes sin final al pozo de los sentimientos oscuros
Lágrimas negras que no son compradas
Penumbras que vislumbras no sin miedo
de seguir cayendo, gritando, hasta el final
Indiferencia ante morir ardiendo
Congelado, trémulo ante la adversidad
Desesperado, odiando a los esperanzados
La tragedia es mecida por el optimismo
de aquellos que saben sonreír
cuando no tienen motivos para vivir

Muros de miedo

Manantial de sangre derramada, de sueños rotos y sonrisas por borrar
Juegan a ocultar el sol, llueve decadencia en el crepuscular mar
Golpes encajados que el tiempo no curará, el miedo no es casual
Niebla, oscuridad y tus refugios no existen, los ves en todas partes
Fantasmas de siluetas anacrónicas, los ves, siguen vagando
Ladrillos sobre los que dibujas una silueta, vaga, imprecisa, aun recuerdas
Barrotes que romperás. No saldrás, muda el escenario, temores.
Sometido, arrodillado y sin ni si quiera gritar…aunque tu voz no se oiga

Sueños, ficción, realidad

Palpas realidades que te encauzan a la felicidad
mientras en la otra orilla los sedimentos se pelean
por su ambiguo reposar. Es la excusa perfecta
para flirtear con la muerte de tu propia libertad
Y ahora te encuentras en un gran depósito
repleto por completo de agua y lava
Dime, ¿nadas o te ahogas en la esperanza?
Buscas salidas a una crueldad cotidiana
Huyes refugiándote en tu propia fantasía
Comprendes que tus pies de plomo se hunden en el fango
Pero nunca has querido renunciar a seguir volando
Continua buscando ¿encontrarás la verdad?
Tu materia gris se torna policroma, contradices tu propia percepción
Y lo sabes, no hay nada peor que luchar contra uno mismo
Pero en este, tu teatro, la belicosidad incrementa tu agonía
En esta gran función ¿quién decide tu destino?
Sigue soñando

Bordeando el abismo

Enmudecida por renunciar inconscientemente a una huida que no tiene fin,
a la que te ves sometida y para la que no encuentras retorno en tu interior
Tu silencio yace roto por las lágrimas que eres incapaz de derramar,
atenazada por el miedo, sumida en un horror constante que hace temblar
Ya no ansias nada, ya nada te importa,
sólo esperas que definitivamente caiga el sol
Y caer en un sueño profundo del cual
soñarás no soñar ni despertar jamás
Sé que yo no soy tú, que no puedo estar en tu lugar,
que las heridas abiertas nunca cicatrizarán,
que cada día que pasa mueres un poco más,
pero ambos sabemos que él ha de expirar
Haz que brote tu ira, libérate y ponle final
Que sienta tu rabia, que sienta tu odio, que no pase un día más
Empuña el arma de la dignidad

Bienvenidos a la fosa común

Un amasijo de hierros se cimienta sobre tu vida
y en tus ojos veo pasar un mundo que se derrumba
Un llanto triste y amargo por aquello que pudo ser
Reminiscencia de algo que soñaste, una vida por la que luchar
Pilares derrumbándose, viejas ideas para un mundo que las desecha
Sólo ves sombras y en tu burbuja ya no queda oxígeno
postrado en la realidad y ya no la puedes cambiar
esclavizado con aquello que creíste disfrutar y necesitar
La tierra se tambalea, falta espacio en la fosa común
Te cegaron y ahora ya es tarde, eres un número más

Virus eterno

El estallido te dejó sordo o quizás éste nunca sonó
Cuando nada tiene sentido sin un suspiro de aliento
Morir diariamente entre la mediocridad,
péndulos que oscilan entre tristeza y desolación
Cuando la distancia da perspectiva de obsesiones
esclavas del tiempo infinito y mortal
Y nada tiene sentido sin la posibilidad de despertar
de una pesadilla que es tan real, virus eterno
Puedes huir, correr y no mirar atrás
o alzar la vista, sentir el dolor y caminar

No vida

No somos dueños de nuestro tiempo, desfilamos ante la muerte
cotidiana y remuneradamente nos enfilamos como en campos de exterminio
Asimilando y amparando la falsa conciencia de la pseudo-felicidad
El sueño del progreso, esclavos disfrutando de su no vida
Pero el germen de la rabia sigue latiendo, agonizando por salir
Y algún día sus fábricas se alzarán ardiendo, ante su mirada temblorosa
hileras de humo trazarán el camino
La calma dará paso a la tempestad, punto de no retorno
La vida comenzará cuando las suyas se desvanezcan
Y aquellos rostros enaltecidos de soberbia, orgullo y victoria
se desdibujarán en el delirio de su propia pesadilla

Down to Agony

No Vida